martes, agosto 24

Ya no están.

o sí, pero cambian (y ahí están, y es igual)

estudiar/trabajar/o…

o

ooh…

¡ser quien soy y hacerme escuchar

cuando vengan a preguntar!

Y esperar /

esperar

/// esperar

sólo por molestar

para no seguir como mono

en estampida

por la vida… ¿hasta dónde?

Dime tu amigo, dime

pero no mientas

ya sabes que si inventas

el barrilete va cruzado

y terminaría en Quién sabe dónde

recibiendo los llamados

de las líneas gratuitas

que reclaman por papa-fritas

que en lugar de sorpresitas

provocaron, epidemia de diarrea,

bien lejos de esta Aldea

porque aquí donde se fabrican

¡Ya se nos hizo costumbre!

Caminar por el costado

de una calle-canal de caca

y mirá si la sacamos barata…

Allá, Alan a Bárbara habla atrás

del retrete que de frente es

chorro loco, por porotos chotos

uuh! un pururú!

Y sí… crisis, crisis

es de heces, que en tres meses

lo solucionaría la administración,

que bien tapado en caca vive,

Pero vestida siempre a la ocasión.

No vaya a ser cuestión

que lo descubra el cliente

¡o peor!: el- Pre si den te

de la ad mi nis tra ción.



Dime tu, amigo: dime

cómo ves la situación

¿Tienes alguna opinión

ante el mundo que nos toca?

¿o prefieres fernet y coca,

meta juerga y en pelotas,

ser parte de esta ciudad loca

tapada en caca que al rato explota…?



“ A mí que me importa,

A mí que me importa,

como torta, y ¿sabés qué?

¡Yo corro con mi fernet!

Si voy ciego: ¡nadie me ve!

¡Solución a mis problemas!

Corre, corre, corre

por la calle, como flema

que despide el fumador

contra la pared inmaculada

¡listo, punto, fin, más nada!

Se acabó lo que se daba,

la vida ha concluido.

¿habrá un paraíso perdido?

Yo qué sé ¡qué me importa!

¡Vamos, corre, corre corre

meta torta, fernet, juerga…

y en pelotas!"

sábado, agosto 14

ROMANCE DEL PRISIONERO

Que por mayo era, por mayo,
cuando hace la calor,
cuando los trigos encañan
y están los campos en flor,
cuando canta la calandria
y responde el ruiseñor,
cuando los enamorados
van a servir al amor;
sino yo, triste, cuitado,
que vivo en esta prisión;
que ni sé cuándo es de día
ni cuándo las noches son,
sino por una avecilla
que me cantaba el albor.
Matómela un ballestero;
déle Dios mal galardón.

miércoles, agosto 4

.





lo bue
si bre,
dos veces
bue.



(Oche Califa)